«Bendito Padre celestial, te doy gracias porque has tenido cuidado de mí, me has amado y me has perdonado. En este momento, te pido perdón por mis fallas, mis iniquidades y transgresiones, y te pido que, en el Nombre de Jesús, me perdones y me ayudes a ser más como tú. Toma el control de mi vida, mi corazón y mi mente. Ayúdame a vivir una vida que te agrade y que sea conforme tu voluntad y dirígeme para no apartarme de tu camino. Líbrame de toda tentación del maligno y enamórame cada día más de ti para no fallarte, amén.»

compartir por messenger
compartir por Whatsapp