Evangelio de Hoy.. Lectura Bíblica: «…Porque los gentiles buscan todas estas cosas; pero vuestro Padre celestial sabe que tenéis necesidad de todas estas cosas. 33 Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas. 34 Así que, no os afanéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su afán. Basta a cada día su propio mal» Mateo 6:32-34

Las personas buscan éxitos, bendiciones, buenas cosas, milagros etc. Lo interesantes es que todos buscan las cosas buenas que les ayuden en su vida, y además que los haga ser en cierto sentido valiosos a la vista de otro o tomados más en cuenta.

¿Pero cuál realmente es el secreto para poder ver plasmado eso?

Vamos poner un ejemplo: tú trabajas en un lugar que son 8 horas de trabajo y además de eso, tomas un tiempo extra o part time o Half time en inglés.

Aún así, sumido entre tanto trabajo no ves la luz, más bien como que te ahogas aún más. Pero el engaño está en pensar que atiborrandome de trabajo obtendré ese éxito o bendición.

Pero me doy cuenta, o nos damos cuenta que la ansiedad o preocupación están haciendo su efecto dañino en nuestro ser, ya que los pensamientos sin esperanza solo nos trae dolor y aflicción del espíritu, y físicamente nos llena la sangre de radicales libres de oxígeno y nos oxida las células buenas y nos produce un envejecimiento prematuro.

Eso es lo que en verdad encuentro.

Nada de lo que haga mejorará, a menos que haga cambios radicales en mi vida y comience a hacer algo que no todos hacen, y ¿qué es eso?

Bueno explicaremos esa parte:

Debes hacer un tiempo extra, ese extra comienza con la oración a Dios tu creador, ese tiempo extra oficial muchas personas no lo tienen en agenda, están tan llenos de cosas por hacer que olvidan orar para que su día sea más fructífero y bendecido. Allí debe comenzar a ganar la batalla del día en ese momento inclinados ante la presencia del gran Rey de Reyes y Señor y de señores.

Así debes apartar tiempo extra de tus clases y tu trabajo, para que comiences a ver las bendiciones que están deparadas para nosotros.

Debes recordar caminar esa milla extra, esa milla que nadie quiere caminar por estar ya cansados, cómodos ya debajo del árbol por haber caminado la milla de las obligaciones, y debes pedir fuerzas para que vengan nuevas y camines la otra milla. Allí en esa otra milla extra llegarás a ver lo que nadie logra ver, porque solo caminan en lo ordinario, en lo común, en lo cotidiano, más no se detienen a observar detalles.

Por ahora es lo que debes saber y hacer y si lo pones en práctica; te aseguro que andarás en otro nivel, ese se llama el nivel celestial y no el terrenal.

Dr. Mauricio Loredo

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