“…He aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén”. Mateo 28:20b.

Imagina a los discípulos rodeando al Maestro y viendo cómo se iba al cielo para siempre. Seguramente se comenzaron a hacer muchas preguntas. ¿Qué haremos con los asuntos difíciles ahora que no estará Jesús? ¿Quién nos aconsejará? ¿Quién nos reconfortará y consolará en los momentos difíciles? ¿Quién estará con nosotros cuando…?

Las preguntas que resonaban en sus mentes fueron respondidas con las últimas palabras del Señor: “Yo estoy con vosotros todos los días…” Sí, en presente. Esta promesa incondicional e inquebrantable se sigue cumpliendo en la vida de cada hijo de Dios ¡todos los días…! ¡Aleluya!

Jesús está con nosotros en los días de angustia para reconfortarnos con su presencia. Él nos dijo que pasaríamos momentos de aflicción, pero que debíamos seguir confiando. Él no olvida a sus hijos y siempre llega a tiempo para ayudarnos. “Invócame en el día de la angustia; te libraré, y tú me honrarás.” (Salmo 50:15).

Jesús está con nosotros en los días malos. Esos días cuando Satanás lanza todo su armamento contra nuestras vidas para hacernos caer en tentación, debilitar nuestra fe y hacernos retroceder. El Señor nos ha provisto la armadura espiritual para permanecer firmes, y nos recuerda que Él venció al enemigo en la cruz. ¡Su victoria es nuestra victoria!

Jesús está con nosotros en los días de ansiedad y desesperación. Él nos prometió su paz y descanso al ir a Él y dejar en sus manos todas nuestras cargas. “Echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros”. (1 Pedro 5:7).

Jesús está con nosotros en los días de tristeza y aflicción. Él también lloró junto a sus amigos cuando pasaron por duelos y tristezas. “Porque de la manera que abundan en nosotros las aflicciones de Cristo, así abunda también por el mismo Cristo nuestra consolación.” (2 Corintios 1:5).

¡Jesús está con nosotros siempre! Él nos asegura que nunca estaremos solos. Mantengámonos conscientes de su intervención constante en nuestro diario vivir.

Cortesía Pastor Pablo Giovanini Iglesia Cristiana Renacer Lynn

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