Señor, qué descanso saber que Tú no duermes. Que mientras yo cierre los ojos, Tú seguirás velando por mí. Guárdame, cuida de los míos, y llena esta noche con Tu paz. Gracias por no dejarme solo, ni siquiera en la oscuridad. Amén.

compartir por messenger
compartir por Whatsapp